El hielo del Ártico esconde numerosos misterios, algunos destinados a permanecer intactos, otros destinados a ser desentrañados. Durante la agitación de la Segunda Guerra Mundial, este poderoso acorazado desapareció en las aguas heladas, solo para reaparecer en registros de archivo décadas después. Estos registros inspiraron a un joven erudito y un ávido explorador a embarcarse en la búsqueda del barco desaparecido.