En el marco del desarrollo de cruceros capaces de alcanzar una velocidad de 35 nudos, se exploraron diversas opciones, incluidas mejoras en los buques existentes o en los diseños de buques que ya estaban en construcción. Se presentaron tres variantes de diseño para el crucero mejorado de la clase Wichita. Entre las diversas opciones, la más prometedora implicaba añadir una torreta adicional para la batería principal, aumentando así el número total de torretas a cuatro; sin embargo, surgieron desafíos al intentar instalar la planta motriz en el casco para alcanzar la velocidad deseada. El buque fue diseñado finalmente para alcanzar una velocidad de solo 33 nudos. Como resultado, estos proyectos fueron abandonados.